En Latinoamérica y El Caribe, Guatemala es uno de los pocos países que goza de una población indígena significativa, alcanzando casi la mitad de la población total, un dato que no puede pasar desapercibido. Según cifras de las Naciones Unidas, los pueblos indígenas representan “poco más del 5% de la población mundial y, sin embargo, se encuentran entre las poblaciones más desfavorecidas y vulnerables, representando el 15% de los más pobres”.
Los pueblos originarios son ricos en cultura, historia, conocimientos y habilidades, por mencionar solo unas cuantas características. Sin embargo, muchas veces esa riqueza y valor quedan desatendidos o no se valoran lo suficiente.
Desde que llegué a Progreso, fui testigo de que esta percepción estaba cambiando y convirtiéndose en una fortaleza. El trabajo con y por las comunidades de Guatemala ha sido un constante desde la fundación de la compañía, y hoy continúa más vigente que nunca con la creación de alianzas, unidades de negocio, programas e iniciativas concretas que respaldan este compromiso.
Como compañía que desea construir juntos el país donde todos queremos vivir y el compromiso con las comunidades que rodean nuestras operaciones es algo imprescindible. Esto se ha materializado en nuestra Estrategia de Sostenibilidad; con el pilar de Ciudadano Responsable como fundamento para ejercer una ciudadanía corporativa responsable, basada en el establecimiento, desarrollo y mantenimiento de relaciones enriquecedoras, de confianza y de crecimiento y respetomutuo con nuestras comunidades.
Hoy les quiero compartir una de nuestras unidades de negocio que ha sido ejemplo y referencia de cómo empoderando y capacitando a los miembros de las comunidades locales, es posible generar progreso para todos: AgroProgreso y Finca El Pilar.
Ubicada en San Juan Sacatepéquez, Finca El Pilar busca convertirse en un sitio donde converge un concepto de turismo comunitario, sostenible, ecológico y con pertinencia cultural. Dentro de todo este gran modelo, los grandes y únicos protagonistas son los miembros de las comunidades locales.
Hemos logrado establecer relaciones armónicas y de confianza, con lo cual hemos podido beneficiar a muchas personas y familias, específicamente más de 600.000 personas en el 2022, y así, convertir los desafíos de la zona en oportunidades de crecimiento, de desarrollo y de aprendizaje.
Por ejemplo, hablemos de las mujeres que a través del cultivo de fresas y otros alimentos han mejorado su calidad de vida, aumentado su productividad e independencia económica, y demostrando que son un eje importante en la economía de sus hogares y de la comunidad. Gracias a una alianza de Finca El Pilar con una exportadora de frutas y vegetales, este grupo cultivó y cosechó en la finca diversos alimentos que permitieron la creación de un negocio rentable y sostenible.
¡Pero no solo hemos logrado exportar alimentos, sino también rosas! Comprometidos con impulsar las oportunidades de desarrollo de la zona en Sacatepéquez, Finca El Pilar desarrolló una serie de capacitaciones permitió a las comunidades mejorar la calidad de sus cultivos e incluso formar emprendimientos rurales. Además, se formó la Cooperativa Integral Agrícola de Floricultores Jardines de San Juan, que ha logrado exportar más de 17.000 docenas de rosas a países como USA y Costa Rica en el 2022.
Además, estas iniciativas también se expanden al área de la salud, porque no solo tenemos ese deseo de fortalecer la economía local y beneficiar a los pequeños productores, sino que también priorizamos su salud, bienestar y calidad de vida. Por ello, llevamos a cabo nuestro programa de sustitución de pisos de tierra por pisos de cemento, el cual beneficia a todos los miembros de las comunidades ofreciéndoles condiciones de vivienda saludables, y en conjunto con la Fundación Carlos F. Novella, se realizan capacitaciones en temas de nutrición, para que eso se refleje directamente en la salud de las familias.
Creemos firmemente en el valor y la gran contribución que tienen los pueblos indígenas no solo en la preservación de nuestra historia, cultura y tradiciones, sino también en el desarrollo del comercio local y nacional. Todos nos sentimos orgullosos de compartir en nuestra identidad la historia, la cultura y la riqueza de Guatemala. Compartamos también oportunidades de colaboración, crecimiento y desarrollo para todos para seguir generando Progreso En Todo Lo Que Hacemos.
