Directivos y directivas de las empresas que operan en Centroamérica comparten su visión de los mercados, las apuestas para este y el próximo año, y los nuevos proyectos que marcarán la pauta de la economía.
En esta conversación, José Raúl González comparte y expone el reto que ha supuesto asumir el liderazgo de Progreso desde el 2012. Inspirado por la visión y el propósito de Carlos F. Novella, se comprometió con mantener su legado y fomentar una cultura empresarial basada en la ética y sólidos valores.
Tal como se estableció hace 124 años, Progreso ha estado caracterizado por innovar en sus productos y servicios, sin dejar de lado la visión en el factor social, al ser la primera compañía en implementar la cobertura en salud y educación a sus trabajadores.
Así, José Raúl cree que esa ha sido la base fundamental para el desarrollo y crecimiento del grupo empresarial: mantener viva la cultura generación tras generación. “La lección y enseñanza que más atesoro es hacer negocios apegado a esta cultura organizativa, ya que esto nos ha dado como resultado los mejores negocios que hemos realizado”, señala González.
Gracias a la experiencia que ha adquirido desde muy joven, ha sabido mantener el liderazgo frente a las empresas que ha dirigido, además de haberse mantenido en la actividad académica. Esto lo ha llevado a superar retos y aprovechar las oportunidades al máximo, como el liderazgo frente a grandes proyectos como la construcción y puesta en funcionamiento de la Planta San Gabriel de Cementos Progreso, considerada como la inversión privada más grande en la historia de Guatemala, además de ser un proyecto estratégico para la infraestructura del país.
Desde su liderazgo en Progreso, busca llevar a la compañía a su siguiente nivel de crecimiento regional, convirtiéndola en una multilatina exitosa.
Consulta la fuente original: El Economista
