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Ideas

Resiliencia: el poder de la adaptación

By 30 de agosto de 2023marzo 6th, 2024Sin comentarios4 minutos de lectura

“Navegar en la adversidad”… Quién de nosotros no ha tenido que “hacerle ganas” como popularmente se dice. Enfrentar la adversidad es inevitable. Es cuestión de tiempo para que la vida nos ponga a prueba; ya sea en el ámbito personal, profesional, espiritual, familiar o de cualquier otro tipo. Por lo tanto la clave no es lo que nos pase sino cómo reaccionamos frente a la adversidad. Aquí entra a la conversación un valor fundamental: la resiliencia; que nos da un gran poder para enfocar nuestra vida en la dirección en la que nos gustaría.

Los años de experiencia y el intercambio de ideas con otras personas, me ha permitido transformar retos en oportunidades, convertir las caídas en aprendizajes y sobre todo, crecer. El crecimiento no se logra sin adversidades. O como diría Cayetana Alvarez de Toledo: “nadando en contra de la corriente… pero río arriba”. Para mí, el crecimiento en todo sentido es fundamental. ¿Qué somos en esta vida si no nos transformamos, evolucionamos y crecemos? Para ello es indispensable abandonar la zona de confort ya que ésta nos limita de explotar todo ese potencial que tenemos por ofrecer.

Y así como este valor trae beneficios a las personas, también lo hace con las empresas, haciendo de la resiliencia organizacional un concepto que debemos promover en dichos espacios. El mundo se ha vuelto volátil, incierto, cambiante y ambiguo. Por lo tanto, nos equivocamos más seguido y fracasaremos con mayor facilidad. Lo importante es que esas experiencias nos tomen habiendo desarrollado la resiliencia organizacional necesaria. Sin duda, es un proceso que requiere un esfuerzo, de tiempo, de perseverancia, pero sobre todo, de confianza en nosotros mismos y en nuestros equipos. Por ello, empoderar a cada miembro con las herramientas y capacidades necesarias será un factor clave para lograr el éxito.

En Progreso, puedo asegurar que sobrevivir exitosamente por más de 120 años no se logra sin haber cultivado la resiliencia organizacional. Nuestra cultura está cimentada en la sostenibilidad de los negocios que creamos con clientes y proveedores para establecer relaciones de largo plazo. Adaptarnos y evolucionar han sido capacidades que garantizan nuestro pasado y sostendrán nuestro futuro.

Hoy les comparto cinco maneras de redefinir la resiliencia en las estrategias de sus organizaciones en un reporte de Deloitte que recientemente volví a leer y que hemos aplicado en Progreso:

  1. Guiarse por la razón de ser:  trabajar para que cada colaborador tenga claro que hay algo más grande que sus metas individuales, hay una razón de ser colectiva que inspira a la toma de decisiones y cada acción.
    En Progreso hemos definido como nuestro propósito trascendente: “construir juntos el país en donde todos queremos vivir”; y es lo que nos motiva a trabajar cada día mejor.
  2. Fomentar la confianza de las partes interesadas: es fundamental establecer lazos de confianza tanto de los clientes internos como externos de manera sostenida en el tiempo. 
    En Progreso hacemos énfasis en escuchar a nuestros clientes y colaboradores. Medimos frecuentemente el nivel de compromiso de nuestra organización para tomar las acciones correctivas necesarias así como el índice neto de promoción por parte de nuestros clientes.
  3. Ejercer un liderazgo genuino: desde los más altos mandos, la resiliencia debe ser un valor compartido, en el cual los equipos estén inspirados a tomar y poner en práctica decisiones claras para obtener los resultados deseados.
    En Progreso, uno de los cuatro valores de nuestro Código de Valores Ética y Conducta es, precisamente, el “liderazgo genuino”. Esperamos que todos nuestros colaboradores lo practiquen dentro y fuera de la empresa.
  4. Comprender las interdependencias existentes: se debe evaluar y monitorear todos los tipos de interdependencias dentro de la compañía, de modo que la estrategia general abarque todos los ámbitos posibles y se pueda gestionar a partir del conocimiento y la prevención.
    En Progreso estamos preocupados por la velocidad del cambio y cómo ello puede afectar las diferentes interdependencias de la compañía. Por ello, estamos iniciando una extensa capacitación en cómo las diferentes unidades de negocio deben gestionar el cambio a nivel humano.
  5. Hacer frente a la incertidumbre y adoptar una mentalidad innovadora: la resiliencia se trata de ofrecer a la organización seguridad para cambiar y adaptarse, por ello, adoptar una mentalidad dispuesta a la creatividad como respuesta a los problemas va a ser esencial para lograr el éxito.
    La creación de nuestra aceleradora de negocios corporativa, Progresoes un ejemplo de nuestra preocupación por aprender de los ecosistemas de innovación que existen fuera de nuestra organización y seguir en ese camino de la innovación.

La resiliencia se puede entender como esa capacidad de adaptación y de transformación frente a la adversidad. Pero… para llevarla a nuestras organizaciones debemos, primero, llevarla a nuestras mentes. Los invito a hacer el esfuerzo de conocer más sobre la manera en que podemos practicarla. No me cabe la menor duda que es la herramienta más útil que podemos incorporar a nuestras capacidades y competencias.